«América Antes» se construye sobre una acumulación de evidencias, muchas de ellas previamente relegadas al ámbito de la especulación. Graham Hancock no se limita a presentar una teoría, sino que la sustenta con una profunda investigación que abarca desde sitios arqueológicos previamente inexplorados hasta el análisis de ADN de poblaciones indígenas. La tesis central del libro es que, hace más de 130.000 años, la civilización floreció en una vasta región que abarca el valle del Mississippi, la Amazonía, y otras áreas de América del Norte y del Sur.
El autor se basa en descubrimientos como los de la
– con sus impresionantes pirámides y sus complejos sistemas de drenaje – no son producto de un desarrollo lineal, sino que son el resultado de un esfuerzo consciente para recuperar el conocimiento perdido y para restablecer la armonía con la naturaleza. De forma similar, las pirámides de la selva amazónica pueden interpretarse como centros de aprendizaje y de investigación, donde los conocimientos astronómicos, matemáticos y espirituales se combinaron para crear una nueva sociedad. Se argumenta que estos sitios no eran simplemente lugares de culto, sino también centros de innovación tecnológica y de desarrollo científico. Se cree que estas antiguas culturas desarrollaron sistemas de irrigación, agricultura y construcción que eran mucho más avanzados que los de las civilizaciones posteriores.
Opinión Crítica de América Antes: Entre la Especulación y la Evidencia
«América Antes» es un libro ambicioso y provocador, y su impacto en el campo de la arqueología y la antropología ha sido considerable. Graham Hancock ha logrado plantear una cuestión fundamental: ¿estamos realmente viendo la historia desde la perspectiva correcta? El libro, sin duda, ofrece un nuevo y emocionante marco para interpretar los vestigios arqueológicos de América, y desafía a los arqueólogos y a los historiadores a considerar la posibilidad de que los orígenes de la civilización no estén tan lejos como siempre hemos creído.
Sin embargo, es fundamental abordar el libro con una mentalidad crítica. Aunque Hancock presenta una gran cantidad de evidencia, su interpretación de la misma a menudo se basa en la especulación. Algunos de los descubrimientos que presenta son anécdotas y suposiciones que aún no han sido confirmadas por la evidencia arqueológica convencional. La falta de documentación escrita por las culturas precolombinas, y la destrucción de artefactos por parte de los colonizadores españoles, dificultan enormemente la tarea de reconstruir la historia de estas civilizaciones. Además, la metodología de investigación de Hancock a veces se basa en un enfoque «extraoficial», que a veces se aleja del rigor científico tradicional. Es crucial que los lectores no vean en el libro una verdad absoluta, sino más bien una hipótesis interesante que merece ser investigada y evaluada con cuidado.
A pesar de estas advertencias, «América Antes» es un libro que tiene el potencial de cambiar la forma en que vemos la historia de la humanidad. Sugiere que estamos, quizás, demasiado centrados en el «Viejo Mundo» y que hemos pasado por alto las evidencias que se encuentran en otras partes del planeta. Recomendaría leerlo como un punto de partida para una nueva investigación, no como una conclusión definitiva. Para aquellos interesados en la arqueología y la historia, «América Antes» es un libro que seguramente provocará debates y estimulará la curiosidad. Además, el libro ha puesto en la agenda internacional temas de interés como la importancia del estudio de las civilizaciones «olvidadas» y la necesidad de una arqueología más interdisciplinaria. Es un libro que invita a la reflexión y a la revisión de los paradigmas establecidos.


