La historia comienza con Elena, una mujer que se siente atrapada en una existencia monótona y vacía. Su vida, marcada por la rutina y la falta de propósito, la ha llevado a una especie de letargo emocional. Un encuentro casual con Armand, un hombre igualmente desilusionado y buscando un cambio radical, desencadena una serie de eventos que los lleva a embarcarse en un viaje en bicicleta por las carreteras de Francia. Este viaje no es un simple paseo; es un catalizador para un proceso de
y de belleza que refuerza el mensaje central de la novela: la importancia de conectar con la naturaleza y de apreciar los pequeños placeres de la vida.
Sin embargo, algunos críticos han señalado que la trama es relativamente sencilla y que el desarrollo de los personajes es a veces predecible. No obstante, se podría argumentar que esta simplicidad es precisamente lo que hace que la novela sea tan accesible y reconfortante. «Tándem» no es una novela que nos promete una solución mágica a nuestros problemas, pero sí nos ofrece una perspectiva diferente sobre la vida, una invitación a replantearnos nuestras prioridades y a vivir con más intensidad. Se recomienda, sin duda, a lectores que buscan una lectura amable, reflexiva y profundamente humana.


