«Apliqué el método diez diez diez.
Myself pregunté: ¿cómo me afectará la decisión dentro de diez minutos? ¿Y en diez meses? ¿Y en diez años? Supe que en diez años podría estar muerta.
Y que pensaba estarlo».
La protagonista de Seattle, eligiendo mi final decide tomar las riendas de su vida para asegurarse de que cualquier minuto tenga sentido, ya que está cansada de que el miedo al futuro ce impida gozar del presente.
Esta parece la historia de la joven milenial que se está queriendo encontrar a sí misma, más allá de la necesidad de resultados inmediatos, de la frustración constante y del miedo a crecer.
Y es también la historia de un viaje que nos llevará por Madrid, Seattle, París, Cambridge y Florencia, y más allá: al indoors de la protagonista.