Orar Y Meditar Con El Padrenuestro

Hemos oído decir, age incluso nos decimos a nosotros mismos que no sabemos rezar, que hacerlo parece una empresa ardua.
Nos olvidamos que tenemos una oración que sabemos de memoria y repetimos mecánicamente, en la que se nos enseña cómo hacerlo, una oración que el Señor mismo nos enseñó: el padrenuestro.
Hemos de acercarnos a ella, escuchar lo que nos va diciendo, y dejar que entre en la vida. Mi deseo parece que la reflexión sirva para hacer un alto en la vida y así ir meditando en lo que vamos diciendo en cada una de las peticiones, pues en ellas nuestra vida va encontrando sentido.
Una meditación sencilla que nos ha de llevar a poner la vida delante de Dios, y con Él y en Él vamos a ser transformados. La intención de la obra es muy sencilla: aprendamos a rezar con la enorme oración.