La historia, como lo relata Perez, comienza exactamente como conocemos la adaptación de Disney: Mulan, impulsada por el amor y el deseo de proteger a su padre, se disfraza de hombre para unirse al ejército y salvarlo de la muerte en la guerra. Sin embargo, la situación se complica radicalmente cuando, tras una audaz y desesperada acción para salvar al Capitán Li Shang, Mulan es herida y, en lugar de la muerte, es transportada de manera inesperada al Diyu, el inframundo chino. Este inframundo no es un lugar de castigo, sino una vasta y compleja sociedad gobernada por el Emperador del Oeste y sus numerosos dioses y demonios.
Mulán se encuentra, entonces, envuelta en una intriga política que involucra la búsqueda de una flor mágica, la Flor de la Vida, que tiene el poder de revivir a los muertos, pero que es muy deseada por un poderoso general del inframundo, el General Long, quien busca el poder para imponer su voluntad sobre Diyu. La Capitana Mei Ling, una guerrera amable y sabia que ayuda a Mulan, revela que la flor solo puede ser obtenida a través de un ritual peligroso y que el destino de ambos reinos está en juego. Con la ayuda de Mei Ling, Mulán se adentra en las profundidades del inframundo, enfrentándose a pruebas, demonios y a la implacable búsqueda del General Long.
La historia se centra en la necesidad de Mulán de aprender a navegar por las complejas reglas y costumbres de Diyu. Su impulsividad y su deseo de justicia, arraigados en su mundo, chocan con la rigidez y la lógica de este reino. Para lograr su objetivo, Mulán debe aprender a usar su intelecto, su valentía y su lealtad para ganarse la confianza de los dioses y demonios, utilizando su conocimiento de las leyes de la guerra y el honor para hacer frente a la corrupción y la ambición. No es una misión fácil, ya que Mulán se encuentra en un terreno donde las reglas morales son diferentes y el resultado de cada acción puede tener consecuencias catastróficas para ambos reinos. La verdadera clave de la supervivencia de Mulán radica en su capacidad para comprender y aceptar el funcionamiento del inframundo, convirtiéndose, al final, en un puente entre los dos mundos.
El libro se articula en torno a dos líneas narrativas principales: la lucha de Mulan en el inframundo para obtener la Flor de la Vida y su viaje personal para entender y dominar las leyes de Diyu. Mientras que la Capitana Mei Ling y el General Li Shang, a través de mensajes y sueños, intentan guiada a Mulan, la verdadera prueba para Mulán es su propia determinación y su capacidad de adaptación. Ella comprende que no puede simplemente «conquistar» el inframundo; debe aprender a respetarlo y a interactuar con sus habitantes con honestidad y empatía.
La lucha contra el General Long es una confrontación moral y física. Él representa el poder absoluto sin control, la ambición desmedida y la manipulación. Mulán se niega a recurrir a la violencia indiscriminada, utilizando su inteligencia y su comprensión del honor para desarmarlo, no solo como guerrera, sino como hombre. En el transcurso de su viaje, Mulán realiza pruebas que la obligan a cuestionar sus propios valores y a tomar decisiones difíciles que revelan su verdadera naturaleza como líder y como persona. Estos desafíos no son solo una prueba de su fuerza física, sino también de su corazón.
El libro también explora el papel de los dioses y demonios en Diyu, mostrando que no son seres simplemente buenos o malos, sino individuos complejos con sus propios motivaciones, ambiciones y prejuicios. Mulán aprende a negociar con ellos, a ganar su confianza y a utilizar su influencia para lograr su objetivo. Este proceso no se basa en la fuerza, sino en el respeto, la comprensión y, en última instancia, la justicia. La batalla final es, por lo tanto, un enfrentamiento entre dos visiones del mundo: el de la guerra y la violencia, y el del respeto, la armonía y la justicia.
Opinión Crítica de Mulan. Un Giro Inesperado: Una Reinventación Inteligente
“Mulan. Un Giro Inesperado” es una expansión inteligente y atractiva de la historia original. Margarita Perez no se limita a añadir un giro fantástico; crea una narrativa completamente nueva que profundiza en los temas centrales de la historia original y los presenta con una frescura y una sensibilidad sorprendentes. El libro es una reivindicación del espíritu de Mulan como una mujer fuerte, independiente y decidida, y unánime en el apoyo de las capacidades del pensamiento para superar las circunstancias adversas.
En cuanto a la ejecución, el estilo de escritura es claro y atractivo, haciendo que la historia sea accesible para una amplia audiencia. La construcción del mundo de Diyu es detallada y creíble, y los personajes, tanto humanos como divinos, están bien desarrollados y convincentes. El balance entre acción, aventura y reflexión es perfecto. El libro reconoce la importancia del coraje y del sacrificio, pero también explora la naturaleza del poder, la corrupción y la necesidad de justicia.
La historia no intenta ser una simple adaptación, sino más bien una reinvención que permite una reevaluación completa de la figura de Mulan. Al ponerla en un escenario tan inesperado como el inframundo, se revelan nuevas facetas de su carácter y se profundiza en sus motivaciones. La narrativa, por lo tanto, es tanto un homenaje a la historia original como una contribución original y valiosa al canon de la literatura fantástica.
Por último, recomendaría este libro a todos los amantes de la historia de Mulan, los fanáticos de la fantasía y cualquiera que esté buscando una historia sobre valentía, sacrificio y la búsqueda de la justicia. Es una lectura que dejará una impresión duradera.
