“Malvadita” de Gabriela Keselman es mucho más que una simple historia de fantasía para niños. Es una novela que explora las complejidades de la familia, el amor incondicional, la adaptación al cambio y, sorprendentemente, la importancia de la risa. Keselman, con su estilo narrativo sencillo pero efectivo, ha creado un universo mágico donde lo sobrenatural y lo cotidiano se entrelazan de manera brillante, ofreciendo una lectura ligera y entretenida, pero con profundas reflexiones sobre las relaciones humanas. El libro está destinado a un público joven, pero sin duda deleitará a lectores de todas las edades que aprecien una buena historia con personajes entrañables y un toque de magia.
La novela destaca por su capacidad de construir un mundo creíble, donde las brujas y los hechizos no son simples elementos fantásticos, sino parte integral de la vida de la familia. A través de la perspectiva de Malvadita, una niña bruja que descubre su legado, el lector se sumerge en una realidad donde lo inexplicable coexiste con la cotidianidad, planteando preguntas sobre la tradición, la modernidad y la aceptación. La obra, además, destaca por su humor, con situaciones cómicas que alivian la tensión de los momentos más serios y animan a la risa.
Malvadita, una niña de diez años, vive una vida peculiar: su familia es, literalmente, una familia de brujas. Sus padres, Don Eusebio y Doña Consuelo, son poderosos hechiceros que residen en una casa llena de artefactos mágicos y, por supuesto, con una gran colección de ingredientes para sus hechizos. Malvadita, aunque disfruta de las «lecciones» de magia de sus padres y de las «cosas raras» que pasan en casa, siempre se ha sentido un poco extraña, una especie de “desajuste” en un mundo donde la magia es la norma. Su vida, en esencia, es una mezcla de caos controlado, de hechizos fallidos, de plantas que revienten y de animales que hablan.
Sin embargo, la llegada de Martín, un niño de su edad que se convierte en su primo hermano, marca un punto de inflexión en la vida de Malvadita. Martín es un niño moderno, con gafas, un portátil y una visión del mundo mucho más pragmática. Su presencia perturba el equilibrio mágico de la casa y la relación de Malvadita con sus padres, que, aunque la aman, a menudo se dedican a «hacer mimos» y a lanzar hechizos sin prestarle mucha atención. La situación se complica aún más cuando Martín empieza a cuestionar la magia, a preguntarse si realmente existe y, en general, a no encajar en la tradición familiar. Malvadita, dividida entre su amor por su familia y su deseo de comprender el mundo que la rodea, se siente cada vez más aislada y frustrada.
La historia se desarrolla alrededor de la búsqueda de Malvadita de su identidad y de su lugar en la familia. A medida que la trama avanza, se revela un oscuro secreto familiar, un pasado turbulento y una amenaza inminente que pone en peligro el equilibrio del mundo mágico. Malvadita, junto con Martín, se embarca en una aventura llena de peligros, descubrimientos y aprendizajes que la obligan a crecer y a asumir su papel de bruja. A pesar de las diferencias, la pareja se convierte en la base de una profunda amistad, fundada en el respeto, la lealtad y el sentido del humor.
La resolución del misterio familiar gira en torno a la desaparición de una antigua bruja, que resultó ser la abuela de Don Eusebio y Doña Consuelo. Esta bruja, conocida como la “Magistral”, había sido exiliada por su ambición y su deseo de controlar el poder mágico, y había dejado tras de sí un legado de secretos y peligros. El hallazgo de un antiguo libro de hechizos, junto con las pistas dejadas por la «Magistral», revelan la verdadera identidad de la bruja desaparecida y la razón de su exilio. Este descubrimiento obliga a Malvadita y a Martín a enfrentarse a los peligros que acechan en el mundo mágico y a luchar contra las fuerzas oscuras que amenazan con destruir el equilibrio.
Para entender completamente la amenaza y la historia familiar, Malvadita y Martín se ven impulsados a participar en un ritual antiguo, que les permite conectarse con la «Magistral» y recuperar su poder. A través de este ritual, no solo recuperan el poder mágico de la familia, sino que también comprenden la importancia de la responsabilidad y el respeto por el poder de la magia. Además, descubren que la «Magistral» no fue una villana, sino una protectora, que había salvado a la familia de un peligro aún mayor. La novela también explora el tema del perdón y la reconciliación, mostrando cómo el amor y la comprensión pueden superar los errores del pasado.
Finalmente, Malvadita y Martín se convierten en guardianes del equilibrio mágico, protegiendo el mundo de amenazas y asegurando que la magia se utilice para el bien. La novela culmina con una celebración familiar, donde se reconoce el valor de cada miembro y se fortalecen los lazos familiares. La amistad entre Malvadita y Martín se consolida, demostrando que la unión y la diversidad pueden ser una fuerza poderosa. Al final, se entiende que no hay «hechizo» que pueda resolver todos los problemas, pero que la familia, el amor y la perseverancia pueden superar cualquier adversidad.
Opinión Crítica de Malvadita
“Malvadita” es una novela encantadora y original que destaca por su imaginación, su humor y sus personajes entrañables. La autora, Gabriela Keselman, ha creado un universo mágico creíble y divertido, donde lo sobrenatural se mezcla con lo cotidiano de una manera natural y sin artificios. El estilo narrativo es accesible y dinámico, ideal para lectores jóvenes, pero también apto para adultos que buscan una lectura ligera y entretenida. La capacidad de Keselman para crear situaciones cómicas y personajes memorables es una de las mayores virtudes de la novela.
La historia de Malvadita es una metáfora sobre la adaptación al cambio y la importancia de aceptar las diferencias. La llegada de Martín, un niño moderno y racional, pone de manifiesto las tensiones entre la tradición y la modernidad, y la necesidad de encontrar un equilibrio entre ambas. La novela también plantea preguntas sobre la identidad y el propósito de la vida, y la importancia de asumir la responsabilidad de uno mismo y de su entorno. La exploración de la relación entre Malvadita y sus padres es especialmente interesante, ya que muestra las dificultades de comunicación y las frustraciones que pueden surgir en una familia.
A pesar de su tono ligero y divertido, “Malvadita” tiene un mensaje profundo y conmovedor. La novela nos recuerda que la familia es un refugio, un lugar de amor y apoyo, incluso cuando las cosas se ponen difíciles. También nos enseña que no debemos tener miedo de ser diferentes y que debemos abrazar nuestras peculiaridades. “Malvadita” es una novela que te hará reír, pensar y, sobre todo, sentir. Se recomienda especialmente a familias que buscan una lectura que fomente la imaginación y el vínculo familiar, y como un buen punto de partida para explorar el mundo de la magia y la fantasía.
