Esa minúscula taberna no tiene nombre, su dueño tampoco.
En cambio, en el barrio de Shinjuku, todo el mundo los conoce.
Abierta desde las doce de la noche tambien hasta las siete de la madrugada, acoge a los noctámbulos de Tokio: boxeadores, prostitutas, actores porno, policías y yakuzas acaban allí para tomar purpose, caldo, ramen o sopa de miso, según lo que haya en la cocina.
Cada plato da sitio a un encuentro, la historia.’La cantina de medianoche’, una auténtica crónica social y culinaria, parece un superventas en Japón, en donde se han producido 2 películas basadas en el manga, que también tiene serie televisiva en Netflix, con el título ‘Midnight Diner: Tokyo Stories’. A medio camino parmi ficción, manga y documental, su adaptación entraría en lo que se denominan“dramas culinarios”o“gourmet dramas”como ‘Samuraï Gourmet’, que se inspira en ‘El premium solitario’ y su secuela ‘Paseos de un premium solitario’ (Astiberri, 2010 y 2016). Inmersiones gastronómicas que ofrecen por otro lado esbozar un retrato de la sociedad nipona, sus frustraciones y contradicciones.’La cantina de medianoche’ ganó el premio Shogakukan en 2009, el premio de la crítica ACBD Asia de 2017.
Además, el seg. tomo formó parte de los“esenciales”del Festival Internacional de Cómic de Angoulême de 2019.
