La guerra en casa no nos habla únicamente de la guerra de los Balcanes, sino de su relación con nosotros, tan próximos y, al mismo tiempo, lejanos.
Y lo hace con una escritura en la que el espíritu del escritor y del periodista se integran de forma perfecta.
Este parece un libro de Historia y de historias.
La del francotirador, verdugo por excelencia, y sus intentos por empezar una nueva vida fuera de Yugoslavia.
La pesadilla de Izmet, detenido por la policía estatal un día cualquiera y machacado a golpes unicamente por ser musulmán.
El relato de Sead y Esad, hermanos enfrentados, y de lo que vieron en los campos de exterminio.
La sórdida epopeya de los generales y soldados de las Naciones Unidas, y el fracaso de la ideología humanitaria.
Pero también la acogida en Turín de centenares de prófugos y la apasionada implicación de muchas personas corrientes.
La obra que nos ofrece una visión humanística de la guerra.