La historia se centra en Elena, una mujer aparentemente ordinaria, que vive en Granada. Su vida, marcada por la rutina y la ausencia de grandes emociones, toma un giro radical cuando conoce a Samuel, un ser de apariencia humana, pero de una naturaleza fundamentalmente diferente. No es un monstruo en el sentido tradicional, sino una criatura con habilidades y capacidades que desafían las leyes de la física y la lógica. Desde el principio, queda patente que Samuel posee una inteligencia superior, una sensibilidad casi inhumana y una conexión con el mundo que trasciende la comprensión humana. Su existencia, en sí misma, es un misterio que Elena, una mujer acostumbrada a la lógica y al orden, intenta desentrañar, pero se encuentra constantemente frustrada por las limitaciones de su propio entendimiento.
La relación que surge entre Elena y Samuel es compleja y perturbadora. Elena se siente atraída por la inteligencia y la fuerza de Samuel, pero también por la inquietante sensación de que está viviendo en un mundo paralelo. Samuel, por su parte, parece sentirse con una profunda conexión con Elena, aunque su comportamiento a menudo es enigmático y dificulta la comprensión de sus verdaderas intenciones. La novela explora la dinámica de poder entre ambos, la dependencia emocional y la desorientación que provoca la presencia de lo inexplicable. A medida que Elena se sumerge más en el mundo de Samuel, se ve envuelta en una red de secretos, mentiras y peligros que amenazan con destruir su vida. La trama se complica con la aparición de otros personajes, cada uno con sus propios motivos y conexiones con Samuel, y la necesidad de Elena de descubrir la verdad por la que se siente cada vez más atraída.
La ambientación de Granada juega un papel crucial en la novela. La ciudad, con sus calles estrechas y laberínticas, sus patios llenos de flores y sus historias milenarias, se convierte en un personaje más, contribuyendo a crear una atmósfera de misterio y opresión. Los lugares específicos en los que se desarrollan los eventos, como el Real Alberca y el barrio del Albaicín, intensifican la sensación de irrealidad y desorientación, reflejando la crisis existencial de Elena. Además, Córdoba utiliza la riqueza histórica y cultural de Granada para tejer una narrativa que va más allá de la simple historia de amor, explorando temas como el poder, la religión y la búsqueda de la identidad.
El relato se desarrolla a través de una serie de encuentros y revelaciones que revelan la historia oscura de Samuel. Se descubre que no es un ser natural, sino el resultado de un experimento científico fallido realizado por un grupo de ocultistas que buscaban trascender los límites de la vida humana. Samuel, como consecuencia de este experimento, posee habilidades sobrenaturales, pero también sufre de una profunda soledad y una desconexión del mundo que lo rodea. Su existencia es una carga, y su relación con Elena se convierte en una forma de intentar llenar ese vacío existencial.
La trama se complica al revelarse que Samuel ha estado involucrado en un conflicto entre diferentes facciones ocultistas, y que su capacidad para acceder a la información le ha convertido en un objeto de deseo para aquellos que buscan el poder. Elena, al proteger a Samuel, se encuentra ahora en el centro de este conflicto, y se convierte en un objetivo para aquellos que quieren utilizarlo para sus propios fines. La novela utiliza el género de la ciencia ficción y el thriller psicológico para explorar la naturaleza de la conciencia, la identidad y la posibilidad de que las experiencias humanas puedan ser alteradas mediante la ciencia. La ambigüedad de la narrativa, donde la línea entre la realidad y la ilusión se desdibuja, refuerza la sensación de inquietud y desorientación que experimenta Elena.
A medida que la historia avanza, Elena se ve obligada a cuestionar todo lo que creía saber sobre el amor, la vida y la muerte. Su relación con Samuel se convierte en un espejo que refleja sus propias inseguridades y deseos más profundos. A través de sus interacciones con Samuel, Elena se enfrenta a su pasado, a sus miedos y a sus sueños, y se ve obligada a tomar decisiones que tendrán consecuencias irrevocables. La novela utiliza el simbolismo y la metáfora para transmitir ideas complejas sobre la naturaleza humana y la condición de la existencia, convirtiendo la historia de amor en una profunda meditación sobre la vida y la muerte. El final, ambiguo e impreciso, deja al lector con la sensación de que la verdadera historia de Elena y Samuel solo se ha revelado parcialmente.
Opinión Crítica de Hasta Que Punto Se Debe Amar
“Hasta Que Punto Se Debe Amar” es una novela inquietante y provocadora que explora temas profundos de una manera original y sorprendente. Antuan Córdoba ha logrado crear una atmósfera de suspense y misterio que atrapa al lector desde las primeras páginas. La escritura es intensa y evocadora, y la construcción de los personajes es impecable. La novela es una reflexión sobre la naturaleza del amor, la identidad y la capacidad humana para el sacrificio. La utilización de Granada como escenario no es casual: añade una capa de misterio y opresiva belleza a la historia, convirtiéndose en un elemento clave para la construcción de la atmósfera.
La novela es una muestra del talento de Córdoba en la creación de personajes complejos y atormentados. Elena es una protagonista imperfecta y vulnerable, que se enfrenta a circunstancias extraordinarias con valentía y determinación. Samuel, por su parte, es un personaje fascinante y enigmático, cuya naturaleza y motivaciones permanecen siempre en la sombra. La interacción entre ambos personajes es la piedra angular de la novela, y se convierte en un catalizador para la exploración de temas existenciales. El ritmo de la narración es ágil y constante, manteniendo al lector en vilo hasta el final.
Sin embargo, “Hasta Que Punto Se Debe Amar” no es una lectura fácil. La novela es oscura, perturbadora y, en ocasiones, confusa. La ambigüedad de la trama y la complejidad de los personajes pueden resultar frustrantes para algunos lectores. No obstante, es precisamente esta ambigüedad la que hace que la novela sea tan memorable. La obra de Córdoba nos invita a reflexionar sobre cuestiones fundamentales de la existencia humana, y nos desafía a aceptar que las respuestas a las preguntas más importantes de la vida a menudo están más allá de nuestra comprensión. Se recomienda esta novela a lectores que aprecien la literatura de suspense psicológico, el thrillers con toques de ciencia ficción y la exploración de temas filosóficos y existenciales. Es una lectura que, una vez terminada, permanecerá en la memoria del lector durante mucho tiempo.


