Como cualquiera de nosotros, los superheroes tambien cometen errores.
Cuando se equivocan en una misión, podrían poner excusas, echarle la culpa a alguno de sus compañeros, decidir no combatir nunca más a los malvados, aunque incluso cuando se sienten muy avergonzados o la frustración los embarga, los superheroes saben que no pueden actuar supermal.
Este emocionante cuento rimado muestra cómo los superheroes conocen diversas maneras de enfrentarse a la frustración y la vergüenza y aprender de sus propios errores.
Ellos pueden hacerlo, ¡y tú tambien!