El escritor David Benioff, conocido por su participación en el aclamado “Juego de Tronos”, regresa ahora con “Ciudad de Ladrones”, una novela que se sumerge en los oscuros y desesperados días del asedio de Leningrado durante la Segunda Guerra Mundial. Destino, editora especializada en narrativa histórica y de aventura, ha publicado esta obra, una historia que combina con maestría la tensión de una guerra brutal con la intriga de un crimen y un toque de humor negro. La novela, lanzada en el 80º aniversario del sitio de Leningrado, se presenta como un tributo a la valentía y la resistencia de la ciudad, pero también como una exploración de la moralidad en tiempos de guerra y la desesperación que puede llevar a las personas a hacer cosas impensables.
“Ciudad de Ladrones” no es una novela de guerra convencional; no se centra en batallas épicas o en la estrategia militar. En cambio, la historia se construye alrededor de un personaje central, Lev, y su improbable compañero, Kolya, y su participación en un encargo ridículamente absurdo que los mete en una espiral de peligro y aventura. La novela explora la complejidad de la situación de Leningrado, un bastión soviético bajo el implacable asedio nazi, y la lucha de sus habitantes por la supervivencia. Benioff teje una historia rica en detalles y personajes memorables, creando una atmósfera de tensión constante y un sentido palpable de peligro inminente.
La novela se centra en Lev, un joven y desorientado residente de Leningrado, que termina en una celda de prisioneros con Kolya, un exsoldado desertor con un pasado turbio. La historia comienza con un incidente aparentemente banal: Lev, por una inexplicable decisión, arrebató un rifle de un cadáver alemán en el devastado centro de la ciudad. Este acto, considerado un acto de traición y saqueo, lo lleva a ser arrestado y encerrado con Kolya, un hombre que, según se cuenta, ha desertado del ejército rojo. En lugar de ser ejecutados, se les ofrece una improbable oportunidad de vida: deben conseguir una docena de huevos para el pastel de boda de la hija del coronel Volkov, un alto rango oficial soviético.
Esta tarea, aparentemente trivial, se convierte en el catalizador de una aventura a través de los bajos fondos de Leningrado, un laberinto de calles destruidas, mercados negros, y personajes peligrosos. Lev y Kolya se ven envueltos en una red de corrupción, engaño y violencia, mientras intentan rastrear la fuente de los huevos necesarios. El libro explora la fragilidad de la moralidad en tiempos de guerra, donde las reglas del honor y la lealtad se ven desafiadas por la necesidad de sobrevivir. El coronel Volkov, personaje clave en la historia, es una figura ambigua, un hombre de poder y de secretos, que ofrece a Lev y Kolya su ayuda a cambio de un favor que podría tener consecuencias incalculables. La narrativa se enriquece con descripciones vívidas de la ciudad bajo asedio, mostrando la lucha diaria de los ciudadanos por la supervivencia, y las devastadoras consecuencias del conflicto.
La búsqueda de los huevos los lleva a interactuar con una variedad de personajes memorables: contrabandistas, informantes, prostitutas, y soldados de ambos bandos. El libro explora las tensiones entre los defensores soviéticos y los posibles aliados que podrían estar en el otro lado de la línea enemiga. Benioff mezcla de manera magistral momentos de humor negro con escenas de tensión y peligro, haciendo que la lectura sea a la vez entretenida y conmovedora. La novela no sólo relata un relato de aventuras y misterio, sino que también sirve como una reflexión sobre la naturaleza humana, la capacidad de resistencia, y el impacto de la guerra en la vida de individuos y ciudades.
La búsqueda de los huevos de la boda se convierte rápidamente en un intrincado juego de engaños y maquinaciones, en el que Lev y Kolya descubren una conspiración mucho mayor. Descubren que el pastel de boda no es sólo un evento social, sino un símbolo de poder y control, y que el coronel Volkov está utilizando la boda para manipular a los aliados y desestabilizar a la línea defensiva soviética. A medida que se adentran más en la trama, se ven envueltos en un conflicto entre facciones dentro del ejército soviético y descubren que el desertor Kolya no es quien aparenta ser, y que sus motivaciones son mucho más oscuras que la simple supervivencia.
El libro explora las consecuencias del asedio en la vida de los ciudadanos de Leningrado, mostrándolos como individuos resilientes y, a la vez, vulnerables a las tentaciones y peligros de un entorno desesperado. La novela también introduce una intrincada red de espionaje, donde Lev y Kolya se ven obligados a usar sus habilidades para la supervivencia – la astucia, el conocimiento de los bajos fondos y la capacidad de engañar – para protegerse y lograr sus objetivos. La tensión aumenta a medida que se acercan a la verdad sobre la conspiración y se ven cada vez más amenazados por fuerzas poderosas que están dispuestas a todo para detenerlos.
La resolución de la historia, aunque llena de giros inesperados, se basa en la astucia y la determinación de Lev y Kolya. A través de una combinación de valentía, ingenio y un apoyo inusual de un personaje inesperado, logran frustrar los planes del coronel Volkov y, al hacerlo, contribuyen significativamente a la defensa de Leningrado. El final de la novela no es una victoria limpia y fácil, sino que refleja la brutalidad y la incertidumbre del conflicto, y el hecho de que a veces las acciones más heroicas surgen de las situaciones más desesperadas.
Opinión Crítica de Ciudad De Ladrones
“Ciudad de Ladrones” es una novela atractiva y bien escrita, que logra combinar de manera efectiva elementos de la aventura, el misterio y la historia. David Benioff demuestra una gran habilidad para crear personajes memorables, cuyas motivaciones son complejas y cuyos destinos están intrínsecamente ligados al contexto histórico y político de la Segunda Guerra Mundial. La ambientación en Leningrado, uno de los escenarios más emblemáticos y trágicos del conflicto, está descrita con un gran detalle y una profunda sensibilidad, haciendo que la lectura sea un acto de inmersión en una época de gran sufrimiento y resistencia.
El libro destaca por su ritmo narrativo, que mantiene al lector enganchado desde la primera página. La mezcla de humor negro y momentos de tensión crea una experiencia de lectura que es a la vez entretenida y conmovedora. Si bien la novela tiene elementos que recuerdan a la obra de Benioff en «Juego de Tronos» – la trama intrincada, los personajes complejos y la ambientación detallada – “Ciudad de Ladrones” es una obra más íntima y personal, centrada en la experiencia individual de Lev y Kolya. Si eres fan de la aventura histórica y de las historias sobre personajes moralmente ambiguos, «Ciudad de Ladrones» es sin duda una lectura recomendable.
Es importante señalar que Benioff no intenta retratar una versión glorificada de la Segunda Guerra Mundial. La novela ofrece una visión realista y sombría de la guerra, mostrando la brutalidad, la desesperación y el sufrimiento que experimentaron los civiles y los soldados en el frente de batalla. A pesar de los momentos de humor negro, la novela es, en última instancia, una reflexión sobre la naturaleza humana y la capacidad de resistencia en circunstancias extremas. “Ciudad de Ladrones” es una obra que, sin duda, permanecerá en la mente del lector mucho después de haber terminado de leerla.
